El llamado de la sirena fué aproximadamente a las 9 de la mañana, un vecino que pasaba por el lugar notó un importante humo que salía de un galpón ubicado en el fondo de un terreno de la calle Lagos al 265, en momentos que se registraba una llovizna.
Tres dotaciones a las órdenes del Oficial Claudio M. Villavicencio se movilizaron al lugar y realizaron las tareas de extinción.
En el lugar se encontró gran cantidad de vecinos, periodistas, inspectores de tránsito y policias. La descarga eléctrica que encontró su mejor camino a travéz de la instalación eléctrica del inmueble (caños metálicos) hizo que una pileta lavapiezas combustionara y por consiguiente se encendieran otros elementos que se encontraban en el local.