El incendio que provocó graves daños en una vivienda. Una vivienda de la calle Glattstein sufrió graves daños como consecuencia de un incendio que, por lo que se sabía hasta ayer, fue intencional. Cuando los bomberos concluyeron el trabajo de extinción de las llamas, el padre de la propietaria, Omar Reyes, observó que faltaban dos televisores de 29 y 20 pulgadas. Además, la evidencia de un vidrio roto (y no por efecto del calor) abonaría la presunción de un robo seguido de incendio. Todo se inició alrededor de las 3 de la madrugada cuando alguien advirtió que de la casa ubicada en calle Glattstein al 384 salían llamaradas. Avisaron a la Policía y a los bomberos; éstos concurrieron en dos móviles, con doce efectivos a las órdenes de Pablo Arango. Trabajaron por espacio de una hora y cuarto; «cuando llegamos ya las llamas se veían arriba del techo» contó Arango. El techo del living se derrumbó y las pérdidas en ese ambiente y la habitación donde, supuestamente, se inició el fuego fueron totales. Omar Reyes le dijo a La Opinión que la casa es de su hija Gabriela «la estábamos pintando y no estaba viviendo nadie» explicó. Dijo también que ningún vecino vio ni escuchó nada. «Seguramente entraron a robar y después prendieron fuego» conjeturó con la lógica amargura. «Nos dimos cuenta que faltaban los dos televisores y no sé si algo más, porque cuando fuimos y ya estaba todo apagado, no se veía nada.» La casa siniestrada está ubicada en un barrio densamente poblado, pero que a esa hora de la madrugada -máxime un día de semana- no registra movimiento algo que favoreció, acaso, el movimiento del/los delincuentes. 23-09-2009 Fuente: Diario La Opinión  www.laopinion.com.ar